En Vicente López. Una casa de estilo Tudor se modernizó conservando sus icónicos elementos ingleses - LA NACION

2022-06-01 03:37:11 By : Mr. Charles Zheng

El 11 de mayo es la Noche del Diseño, y Valeria Viotti está en plena organización. Esta abogada con formación también en interiorismo es coordinadora de Distrito Arenales, la asociación que agrupa las tiendas de muebles y decoración de ese polo design en el barrio de Recoleta. El evento es el primer encuentro presencial desde 2019, y aunque ella está en medio de la vorágine de los preparativos, eso no se refleja en su hogar en Vicente López, un refugio de impronta inglesa signado por la claridad.

Su apariencia actual se debe a la reforma del arquitecto Daniel Isla Casares, que renovó las instalaciones, los baños e hizo la flamante cocina integrada al comedor y abierta al jardín. Valeria, por supuesto, fue responsable de la ambientación, cuyo estilo define en una sola palabra: clásico.

"Por mucho tiempo buscamos una casa de estilo, y cuando llegamos acá no lo podía creer: estaba intacta, con sus pisos, su escalera y sus aberturas originales de 1936."

Vitrales y obras de presencia sutil marcan el clima interior de esta construcción de estilo Tudor.

Respetuosa de la fachada inglesa, la reforma preservó su bow window a media altura ganando en intimidad y estilo. Las grandes aberturas aparecerán después, en la zona más funcional de la casa.

Abierto, aireado e integrado a la cocina y al jardín, el comedor se convirtió en el corazón de la casa. “Definitivamente, es mi ambiente favorito”, dice Valeria.

“Soy tradicional para ambientar. Me gusta mucho el blanco y prefiero que los materiales y la arquitectura tomen el protagonismo”.

La nueva cocina tomó parte del garage para consolidar un paquete que integra el comedor y la galería. Materiales nobles y funcionalidad libre de modas y clichés: aquí, el lujo es el espacio.

Los límites se desvanecen y la galería se hace parte de la cocina, con una ambientación que la jerarquiza asimilándola a los ambientes interiores.

“Ampliar la ventana mínima que tenía el dormitorio fue fantástico: nos quedó la vista limpia de la copa de los árboles y, como da al Sur, es todo luz”.

Cama con respaldo entelado, almohadones y pie estampados (todo de Mercedes Segura). Cómoda ‘Huevada’.

Para el cuarto de su hijo mayor, los dueños decidieron reemplazar el balcón original por una bow-window, más segura y elocuente, que se inspira en la original, en planta baja. La dueña elige las obras que le gustan y va probando ubicaciones hasta que encuentran su lugar. Así se dio con el cuadro de Alejandra Barreda (Galería Praxis) bajo la ventana, que resume la paleta de este dormitorio juvenil.

“Acá sí quería la energía del color, por eso elegí un azul bien oscuro y sumé la alfombra y obras de arte más llamativas”.

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