El pasado día 27 de febrero sobre las 18:30 horas, un individuo armado y sobre patines de línea entraba en una farmacia de Leganés para llevarse todo el dinero de la caja. "Lo primero que dijo fue que estuviéramos tranquilas y que le sacáramos todo lo que había, así como con un poquito de voz alzada".

Según no dice una de las farmacéuticas que se encontraban allí en ese momento es que lo que le daba agresividad al ladrón era el arma que llevaba. Mientras empuñaba la pistola, las dos farmacéuticas intentaron buscar una salida en esta comprometida situación. "Nos fuimos lo que es por aquí, a escondernos en la robotica".

Las dos farmacéuticas esperaron dentro hasta que se marchó y, ahora al ver las imágenes grabadas por la cámara de seguridad del establecimiento, les parece una situación incluso cómica, según dicen, aunque "al principio nos llevamos un buen susto".

Algo que llama considerablemente la atención es que, después de todo, el ladrón no se lleva ni siquiera el bolígrafo que tenían encima del mostrador. Se fue tal y como vino: sobre ruedas.

Al parecer, algunos vecinos fueron testigos de cómo este señor en patines, una imagen poco usual, esperaba en la puerta de la farmacia a que no hubiera nadie en su interior para cometer el robo.

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