MÉRIDA.- El viernes de asueto fue aprovechado por decenas de familias para visitar el parque zoológico del Centenario, donde como es habitual una de las actividades más solicitadas fue el paseo en el trenecito. 

Desde temprana hora comenzaron a llegar al zoológico los visitantes, principalmente familias con niños pequeños que disfrutaron de los atractivos del parque junto con sus padres. La fila para adquirir los boletos del trenecito ha sido constante durante el día, ya que es uno de los máximos atractivos del parque. 

El área donde se encuentran los animales fue una de las más concurridas, ahí los paseantes observaban a las aves, como un grupo de coloridas guacamayas que llamaron la atención de una familia, y una pequeña admiraba las plumas de este especie, pero que estaba más sorprendida por el graznido que emitían, pues escuchaba un sonido muy similar a la palabra “papá”, y así se lo dijo a sus padres, quienes coincidieron en que el sonido era muy similar a la palabra. 

Otros niños se mostraron atraídos por los monos, que se balanceaba de un lado a otro, entre los árboles y las cuerdas que tienen colocado en el área que ocupan. “Vamos a ver a los monos” insistía un pequeño a sus papás, quienes miraban a una enorme pitón de la India. 

Dos infantes pedían a sus acompañantes adultos ir a ver a la “mona”, un chimpancé que se encuentra en una de las jaulas antes del pasillo que da acceso al mirador de los monos. 

Los hipopótamos también llamaron la atención de los visitantes, quienes se apostaban a la orilla de la reja que los separa del estanque para verlos remojarse y sacar la cabeza de cuando en cuando. 

“Mira qué bonito” exclamó una madre a su hijo, cuando cruzaban por el área de los felinos, y vio un ejemplar color miel con manchas negras. El pequeño no hizo mucho caso, pues, el leopardo tomaba una siesta y permanecía totalmente inmóvil.  Niños se divierten en el Parque zoológico del Centenario

Las áreas de juegos con toboganes, columpios y resbaladillas fueron muy solicitadas por los niños, que subían corriendo y se deslizaban una y otra vez en los juegos, o se mecían en los balancines. 

Los juguetes de arrastre, como el clásico monito de peluche que maneja una bicicleta, tuvieron buena demanda, al igual que las golosinas como chicharrones, algodones de azúcar, paletas, helados, entre otros. 

Algunas familias previsoras, quizá para no gastar tanto, llevaron consigo su lunch, y se sentaron a disfrutar de sus alimentos en el área de pic nic.

Otros compraron ahí tortas, nachos, kibis, burritos, papas y otros alimentos para degustar, así como refrescos embotellados y aguas para saciar la sed. Se estima que más de cinco mil personas visitaron el parque Centenario en el día de asueto. 

El Parque Centenario de Mérida tendrá una celebración especial

Se supo que el domingo habrá una celebración especial con motivo del aniversario del parque, que como su nombre sugiere, fue inaugurado en el primer centenario del inicio de la Independencia. 

No se dieron detalles al respecto, pero la autoridad municipal debe dar a conocer hoy de qué se trata el festejo.

El ambiente musical corre a cargo de Banda "El Recodo, de Cruz Lizárraga".

Los vehículos de auxilio, así como los contingentes con elementos del ejército mexicano, de la Marina y policías de la SSP fueron los que más llamaron la atención de los presentes.

Recuerdan en sesión solemne la importancia de Yucatán y cómo su política se ha negado a caer en la trampa de la polarización y el enfrentamiento.